El sistema educativo como herramienta de control del pensamiento
Etiquetas: , filosofía, sistema educativo
Vicente Berenguer
Rebelión
Sociedad gris en la
que vivimos; sociedad alienada, robotizada. Cualquiera que vaya un poco más
allá de las apariencias puede percibirlo. El sistema ha ganado, o al menos gana
de momento. El sistema ha anulado en las personas la capacidad de crítica, la
capacidad de reflexión, y si nada cambia la sociedad está perdida.¿Por qué? Esta
es la pregunta más básica que uno puede hacer, pero la aniquilación de la
reflexión llega ya a tal extremo que escuchar hoy en día un “por qué” se antoja
tarea complicada. La sociedad no hace preguntas, los individuos no se
preguntan, no van más allá, no exploran posibilidades ni mucho menos las
conciben en sus mentes, simplemente aceptan.
Pero
nada es por casualidad y esta aniquilación del pensamiento viene de lejos,
viene ya del sistema educativo empezando cómo no por la escuela.
Porque
el sistema educativo tal y como está planteado (tal y como lo han planteado),
aparte de ser la herramienta encargada de supuestamente culturizar a los
ciudadanos mediante contenidos es la herramienta con la que se anula el
pensamiento, es la forma con la que se aleja a los niños, adolescente,
adultos…del pensamiento, de la crítica, para a cambio llevar a todo el mundo a
la aceptación de lo que se les dice, a la aceptación de las normas pero no por
un proceso de reflexión sino porque ello ha de ser así.
El
sistema educativo tal y como está diseñado es una de las principales
herramientas del sistema en pos del adoctrinamiento, en pos del agarrotamiento
mental. Allí no se fomentará la crítica, el proponer soluciones alternativas,
la creatividad; en cambio siempre se plantearán problemas con una única
solución: el niño, adolescente o quien fuere debe hallar la solución que ya
existe o la debe memorizar pero nunca debe buscar alternativas o plantear sus
propias soluciones pues estas no existen, no hay ni puede haber alternativas ni
soluciones propias.
Por
tanto, no se trata de fomentar la expansión de la mente sino su
constreñimiento; no se trata de que la persona ponga en cuestión las normas o
lo que se le dice sino de que acepte que no hay alternativa, que no hay otra
posibilidad a lo ya dicho. Se trata en definitiva de “cortarle las alas” al
pensamiento ya desde la más temprana edad, se trata de construir piezas para el
sistema.
Así,
la creatividad, la reflexión y la crítica son ahogadas desde bien pronto a
cambio de tener ciudadanos dóciles y simples mentalmente, personas que siendo
ya adultas serán incapaces de realizar ninguna crítica ni de plantearse ante
cualquier cuestión o norma ni tan solo: ¿por qué?. El resultado pues son unos
ciudadanos que no se hacen preguntas porque ni tan siquiera saben y que solo
acatan lo que se les dice.
Y
así, las cosas pasan de ser contingentes a ser necesarias: es necesario que el
modelo económico sea el que es pues no puede haber alternativa posible, es
necesario que haya gente viviendo como reyes y otras personas viviendo como
perros abandonados pues lamentablemente ha de ser así, es necesario que nos
gobiernen gente sin escrúpulos y es necesario que les vuelva a votar porque así
es la vida y es lo que hay…y es que no hay más posibilidades que las que me
plantean, es decir, solo hay una posibilidad.
De
este modo la masa es una verdadera masa, una masa maleable y totalmente
adoctrinable, una masa que no hace preguntas ni tan solo se las hace para sí
misma, una masa superficial sin asomo de espíritu crítico. Una masa, en
definitiva, como la que tenemos.
ATTAC Madrid no se
identifica necesariamente con los contenidos publicados, excepto cuando son
firmados por la propia organización.EL
No hay comentarios:
Publicar un comentario