NUESTRO PARTIDO POLÍTICO (III): VER LA REALIDAD

Nuestro objetivo como partido político NO ES "trabajar para y por mi pueblo" como dice algún candidato de por ahí que todavía piensa que con ese tipo de  declaraciones se siguen atrayendo votos. ¿Qué respeto intelectual merece una declaración de este nivel, sobre todo en este momento en que la ciudadanía descree de los políticos?  El problema radica en que nuestra democracia adolece de falta de participación de la ciudadanía. Así, con  ideas tan planas, no se va a lograr el cambio por el que todos clamamos.   Es menester que nos sinceremos. Eso es muy difícil, lo sé.  Para GUADARRAMA EN MARCHA sincerarse es dejar claro que no estamos en condiciones de impulsar un cambio. A la pregunta  ¿por qué nos pasa esto?  hay una sola respuesta y es categórica: no sabemos ver la realidad.  Ver la realidad es asumir que tenemos la capacidad para elegir aquello que satisface nuestros afanes e intereses. Para ello es necesario PENSAR   cuidadosamente. Lo que elijamos servirá para REFLEXIONAR,  para  armar un proyecto de vida que nos aleje del batiburrillo de noticias que se nos lanzan desde los medios; de  escuchar atentamente a los políticos para sacar conclusiones  que encajen en nuestro proyecto ya para mejorarlo, cambiarlo o reforzarlo,  siempre con  espíritu crítico. No tenemos capacidad para elegir porque no sabemos pensar; tampoco reflexionamos Tenemos los valores trastocados. Es imposible, dadas estas circnstancias,  crear un proyecto de vida que incluya actitudes deseables que alienten nuestros afectos, nuestra voluntad, nuestra inteligencia y un sano criterio para valorar la libertad.  Así hemos llegado a este estado de cosas con  el afecto quebrado; somos egoístas y vivimos atomizados; no sabemos ponernos en común, no somos tolerantes; con la voluntad  puesta al servicio de actitudes intrascendentes refleja nuestra incapacidad de abordar aquella senda por la que anduvieron los "pocos sabios que en el mundo han sido"; con la inteligencia idiotizada por  un sistema educativo que se empeña en negar la capacidad creadora que encierran nuestros hijos y nosotros mismos,  que posterga la imagi-nación, el espíritu investigativo, la creatividad y el afán por descubrir cosas nuevas, la inteligencia, decíamos, se ha transformado en un disco duro que almacena datos y más datos vacíos de contenido; y la libertad,  que hemos postergado  sin haber advertido que confundimos la libertad de andar por la calle, de elegir la película que se estrena o el programa televisivo que nos tiran por la cabeza, por la verdadera libertad: la libertad de conciencia, la que nos distingue, la que nos proyecta hacia los demás, la que podemos compartir con aquellos que nos son afines. Una libertad que de a poco hemos ido perdiendo en beneficio de la seguridad.  Por eso Guadarrama en Marcha se ha lanzado a la política para que nos esclarezcanos entre todos acerca de lo que significa compartir y participar para crecer juntos. GUADARRAMA EN MARCHA NO HA VENIDO A TRABAJAR "PARA Y POR MI PUEBLO", como dijo uno por ahí. GUADARRAMA EN MARCHA SOMOS TODOS TRABAJANDO PARA  Y POR NUESTRO PUEBLO. Sé que no será fácil. Habrá que recuperar afectos, compartir inteligencias, recrear nuestras voluntades y asumir que la libertad de cada uno no se termina donde comienza la de los demás; POR EL CONTRARIO, EN ESE ENCUENTRO SE AMPLÍAN LOS HORIZONTES Y SE COMIENZA A VER.