Cuando una conocida en un arrebato de nacionalismo hispánico me sugirió -es una forma de decir porque fue un insulto más que una sugerencia- me sugirió, decía, que me ocupara de lo que sucedía en mi país, que ella se ocupaba de España, mi respuesta no tardó en llegar, como ya lo he hecho notar en algún otro artículo. No puedo dejar de aclarar , sin embargo que la susodicha es del Partido Popular.
Queda claro que a la luz del momento que estamos viviendo se ha ocupado mal de su país, SI ES QUE LO HA HEHO, AUNQUE NO LO CREO.
El asunto no es lograr éxito en las cuestiones que atañen a los países sino más bien en luchar,
participar y tener ocasión de puesta en común para que se resuelvan los problemas
que nos aquejan más allá de las ideologías que animan generalmente mal nuestros
saberes privándonos de lo esencial para la convivencia y, a la vez de un afán de justicia
que por lo general choca con la ley, en manos de quienes no siempre saben interpretarla.
El caso Cataluña es paradigmático. Hoy mismo, 14 de mayo acaba de elegirse un presidente separatista de esa comunidad republicano, separatista y todo lo que menos se imaginaba el estado. Un caso extraño de conducción política : el elegido está a las órdenes del que lo antecediera, Puigdemont, radicado en algún lugar de Europa (cualquiera puede ser el país porque se ha movido de un lugar a otro) y nadie le ha negado apoyo por aquellos lares que ha recorrido. Es más intervino medio mundo, hasta ONU para destacar el error.
El gobierno de Rajoy en lugar de apelar al diálogo político apeló a la ley, y como ésta es de circunstancias, es errática : Una Costitución que tiene ya varias décadas y a la que la trasnochan los cambios más rápidos que registra la humanidad, ¡válgame dios! terminó en la nada. Es decir, en lo que los independentistas querían lograr: volver a gobernar e insistir en la autonomía.
Lo peor del caso para el gobierno central es que ante el fracaso no sabe más que recurrir a una poco venturosa campaña en todo el país para recuperar votos. Los dos grandes partidos que gobernaron España desde la caida de la dictadura franquista , el PP Y EL PSOE, no figuran en las encuestas más allá de un tercer y cuarto lugar respectivamente. CIUDADANOS SE HA COMIDO AL P.P Y FELIPE GONZÁLEZ SE HA COMIDO AL PSOE. El primero insiste en que es el país que más ha crecido en la UE y el PSOE QUE ES SOCIALISTA. Resulta, sin embargo, que Ciudadanos, EN MANOS DE UN JOVEN QUE PODRÍA SER MÁS PELIGROSO QUE AZNAR, ES EL GRAN CANDIDATO EN LAS PRÓXIMAS ELECCIONES (SI SE LLEGARA A ELLAS YA, COMO ÉL PRETENDE)
Pero le ha salido mal el cálculo. Rajoy acaba de ser defenestrado y el nuevo presidente será Pedro Sánchez: acaba de ser nombrado por el Congreso, precisamente ayer, 31 de mayo.
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